Eduardo Giménez Simón

Recuerdo que a mediados o finales de los 80, El Pais semanal, saco una publicidad. Era un rectangulo de cartón con una puerta y ponía: ” Esta es su entrada de la Expo”. Mi sorpresa fue que a finales del 91 o principios de el 92, El Pais recordó que si habíamos guardado la publicidad, mandandola por correo certificado nos regalaban unas invitaciones para la inauguración. ¡ Y las habí guardado y las conservaba!. En el 92 tenia 19 años y mi hermano 15. Llevaba tres meses saliendo con la que es hoy mi mujer y madre de mis dos hijos. Asi que el 19 de Abril, cogimos un expreso con destino a Sevilla, llegando de madrugada. Tan de madrugada llegamos que a pesar de ir andando desde la estación a la Cartuja, sin moviles, gps y zarandajas, nos colocamos los SEGUNDOS de la fila, solo superados por unos señores de Valladolid, creo recordar, que fueron los primeros en entrar a la EXPO… Vamos, hasta creo recordar que nuestra abuela nos vio por televisión. Fue un día extenuante. Corrimos por todos los pabellones que pudimos hasta altas horas de la madrugada. Creo recordar que visitamos hasta 40 pabellones, cifra inigualada por nuestro conocidos, que ya, en los meses posteriores se tragaron filas kilometricas para entrar. ( Nosotro solo esperamos 30 minutos para entrar en el de Canada, nuestro favorito). ¿ Los mejores?: Canada, Alemania, Rusia, Venezuela ( Donde vimos una pelicula IMAX por primera vez…). Una experiencia inigualable. Que añoranza y que recuerdo me habeis hecho aflorar…