Manuel

Soy de Huelva (ahora vivo en Barcelona) y viví por 1a vez el orgullo gay de Madrid, no recuerdo si fue en 2003 o 2005.. solo se que me pareció apoteósico y una muestra enorme de tolerancia y normalidad, con miles de familias enteras bailando en las aceras al ritmo de la música. Tristemente vamos hacia atrás por culpa de la mentalidad de la iglesia y la derecha que parecen respaldar cualquier ataque al colectivo cuando no lo inician ellos mismos. Me alegro de que tímidamente se vayan haciendo más desfiles en otras ciudades por pequeñas que sean. Pero el orgullo en si es más una pasarela para descocarnos, lo realmente importante es que la gente se conciencia de que su cartero, su médico, su sobrino o su hermano pueden ser gays, y que no hay nada ni de extraño ni de anormal, sino que todos deberíamos respetar al prójimo, independientemente de lo que haga con su vida privada. A ver si empezamos a impartir esta lección de respeto tanto por las escuelas como por los geriátricos y asociaciones de vecinos…que ambos nichos de edad lo necesitan mas que ninguno.